lunes, 26 de octubre de 2015

¿Sistema educativo? Bah.

Cada día se me presenta la misma duda, cada vez que entro por la misma puerta, cada vez que salgo por ella. Cada día altera mis sentidos la forma de la que está construido todo esto. Sí, el sistema "educativo", pero en especial hoy, cuando en clase un profesor ha mencionado lo siguiente:

               "La diferencia entre un buen alumno y un alumno mediocre se halla en que en el primer tipo, estudia porque tiene ganas de saber, mientras que en el segundo, estudia por aprobar".

Hasta ahí de acuerdo. Muy de acuerdo. Pero, analicemos lo que ha pronunciado éste con detenimiento. ¿Por qué motivo tiene que existir el alumno mediocre, y es más, por qué es el que más abunda en este sistema? "Si dos personas totalmente distintas coinciden en lo mismo, no van muy mal encaminadas..." pasemos un cuestionario por clase, que si de promedio son unos 30 por clase, 26 te dirán que estudian para aprobar si te son sinceros.

El problema es que, el sistema educativo donde residimos, fue concebido y estructurado para una época diferente: en la cultura intelectual de la ilustración, concretamente en las circunstancias económicas de la revolución industrial. Básicamente, ocurría lo mismo, pero ahí anclado más estrictamente. Las escuelas siguen trabajando como si fueran fábricas, (timbres, instalaciones separadas...), especializadas por asignaturas, educación por lotes, nos hacen pasar por el sistema según el grupo de edad... y la pregunta es, ¿por qué? ¿Por qué se supone que lo más común en estos "packs" es la edad y no los intereses? En este sistema habían dos tipos de personas (contando que la educación pública era impensable), académicas y no académicas. ¿Os resulta familiar, verdad? Académicas eran las que destacaban en dos variables: el razonamiento deductivo y conocimiento sobre la cultura clásica, en fin, que el resto eran las "no académicas". Después de todo esto, muchas personas pensarán "¡qué ridículo!" pero hoy en día si sustituimos la variables por capacidad de razonamiento-matemático y capacidad memorística ya tendríamos el resultado de nuestro actual sistema educativo. "Todo el mundo es un genio. Pero si juzgas a un pez por su habilidad para trepar árboles, vivirá toda su vida pensando que es un inútil"Albert Einstein.

Nos castigan continuamente, semanalmente, diariamente si no prestamos atención a lo que se está explicando, contenido inútil para nuestra vida, bueno, perdona si no te presto atención, pero es que no me importa (hablando en plata) una mierda lo que estás explicando, no me apetece memorizar todo esto para que al día siguiente de realizar el examen, se esfume de mi cabeza, si realmente fuera una cosa importante y con utilidad, mi cabeza haría lo posible por retenerla dentro de ella. Que esa es otra, ¡los exámenes! ¿En serio sois capaces de analizar si soy "apta" o "no apta" a través de una nota, ¿EN SERIO? En qué estáis pensando, de verdad.

Y por último, otra gran incongruencia: el enfoque. ¿Por qué debo de plantearme si la información es útil o no? ¿Dónde está la motivación para abrir un libro de texto y ponerme a estudiar? Siempre se cumple el proceso contrario, desmotivación, y si tú preguntas ¿para qué quiero estudiar yo esto? te responderán con un "para ser de mayor algo, tener un título, ser (inserte profesión)", pero a día de hoy, estos títulos dan igual, no tenemos puesto asegurado en el futuro, así que más bien la motivación realiza el proceso contrario, pero ya esto es otro asunto...

Quiero creer, quiero creer para bien, que cuando me pregunten terminando segundo de bachiller: "¿qué has aprendido?" pueda responder algo y no quedarme en blanco.

Para finalizar, no puedo decir que todo esto sea igual en todas partes, quiero decir que es mi visión, que todo esto es discutible, y si hay discrepancias al respecto o si queréis añadir algo, dejadlo en comentarios, estoy dispuesta a debatir. Y quiero dar las gracias a quien dentro de este sistema, se sale un poquito de él y logra captar mi atención, mis más sinceros respetos.

                                           Fuente de información (muy didáctico):



               

3 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo con tu punto de vista. Más de un político debería de leer esto, aprenderían más que en todo su bachiller. Buen trabajo, Alba.

    ResponderEliminar
  2. Yo no estoy de acuerdo del todo contigo porque cuando abro un libro, de una asignatura que me guste (que las hay), no pienso que los conceptos no me vayan a servir de nada, sino que disfruto alimentando mi sabiduria con lo que contiene, y me fascina el modo en el que, por ejemplo los matemáticos o físicos deducen las cosas, ven donde yo antes no llegaba a ver nada

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Como anteriormente he dicho, esto es una generalización "pasemos un cuestionario por clase, que si de promedio son unos 30 por clase, 26 te dirán que estudian para aprobar si te son sinceros", y esta bien que tú puedas entrar entre esas 4 personas restantes. Claro que pueden haber asignaturas que nos apasionen o nos encanten, pero por general, casi todos nos cuestionamos el por qué estudiar la asignatura que no le vemos práctica. A mi por ejemplo, me apasiona la biología y me encanta buscar y rebuscar cosas que en el instituto no nos enseñan porque el humano es curioso por naturaleza, y como bien has dicho, a mi también me fascina que los matemáticos o físicos deduzcan cosas donde yo antes no he podido llegar a ver nada.

      Eliminar